lunes, 29 de agosto de 2011
DE VOLTAIRE A NUESTROS DíAS
domingo, 28 de agosto de 2011
UN TECHO DE GASTO CONSTITUCIONAL, PARA EL VACIO DE IDEAS
La propuesta de modificación de la constitución para incluir en la carta magna un artículo que ponga techo de al gasto de la administración pública española, está convirtiendo este final de legislatura, en un espectáculo bochornoso, digno de una republica bananera.
Es un acto lamentable de nuestro gobierno, a menos de 100 días de unas elecciones, embarcarse en un proyecto de esta envergadura, que debería estudiarse con detenimiento por parte de todas las fuerzas políticas que representan a los ciudadanos, con el fin de llegar a una modificación que sirva para todos y que sea duradera, en mi opinión es un error. En vez de hacer eso, en plena precampaña electoral, nuestros dirigentes que representan los partidos mayoritarios en el parlamento, han llegado a un principio de acuerdo con la finalidad de modificar la constitución por la vía de la urgencia, para colocar un artículo que limite el gasto del gobierno y hacerlo sin contar con el beneplácito del pueblo mediante un referéndum como establece el artículo 167, apartado 3 de la constitución en el que dice.
“3. Aprobada la reforma por las Cortes Generales, será sometida
a referéndum para su ratificación cuando así lo soliciten, dentro de
los quince días siguientes a su aprobación, una décima parte de los
miembros de cualquiera de las Cámaras.”
Aunque lo que no alcanzo a entender es porque el nuestros políticos se empeñan en incluir un artículo de esas características en la constitución, que encorsete la autonomía del gobierno que controla todos los ingresos y los redistribuye entre las autonomías, si se puede solventar la cuestión reformando la LGP (Ley general de presupuestos) y la LOFCA (Ley orgánica de financiación de comunidades autónomas), creando reglas de gasto que impidan el gasto desmedido, tampoco se entiende porque nuestros políticos lejos de haber llegado a acuerdos para solventar la crisis económica y de modelo de crecimiento lo que han hecho es pasarse toda la legislatura echándose basura los unos a los otros sin dar una solución a los problemas.
También me resulta difícil entender que nuestros políticos no escuchen la voz de la gente de la calle que es en definitiva para quien gobiernan y pretendan modificar la constitución deprisa y sin tiempo para meditarlo y reflexionar sobre la medida. Lo lamentable de todo esto es que van a modificarla con imponiendo la disciplina de partido a quienes nos representan y la han de respaldar con su voto en el parlamento, olvidando que la disciplina de partido a la hora de votar es el cáncer de la democracia, es el secuestro a la tan ansiada libertad de expresión y el derecho a pensar por uno mismo.
Por eso, como socialista y votante de izquierdas considero una traición al ciudadano esa modificación constitucional, considero que es la primera piedra del final del estado del bienestar, un ciudadano, que no olviden señores diputados sostiene a esta clase dirigente, que se está ab0nando el terreno para convertirse en una casta, como denuncie en mi artículo “Una casta de políticos”, unos diputados que con esa reforma tratan de de poner un techo de gasto a lo que en el fondo es un gran vacío de ideas eficaces para solventar los problemas de la crisis.
“Nos esperan años duros de crisis y miseria, y no porque el país este falto de hombres con ideas, sino porque entre quienes lo dirigen tratan de solventar los problemas pensando de la misma manera que cuando los crearon”
Antonio Garcia Leal ®
martes, 23 de agosto de 2011
UNA CASTA DE POLITICOS
La coocurrencia a los próximos comicios del 20N, puede resultarnos harto difícil, a tenor del cambio legislativo que se hizo el 28 de enero 2011 con el consenso de las formaciones políticas PSOE, PP, PNV y CIU y de la cual se hacía eco ayer el diario Publico que en su versión digital titulaba la noticia “La reforma pone trabas a los nuevos partidos”.
De ser cierto - algo que yo no pongo en duda a tenor de lo que establece en la modificación 51 del artículo del apartado 3 del artículo 169 de la ley electoral en la página 14 del BOE del día 29 de Enero de 2011 - deberíamos reflexionar a fondo sobre la deriva política que está tomando nuestra democracia que con medidas como esa está gestando para creación de una casta política que excluye al resto de ciudadanos que pretendan participar en la vida pública creando formaciones políticas que defiendan aquello en lo que creen dentro del marco legal y democrático que está establecido, sin que estas queden dentro de las formaciones existentes.
Y es que es inaceptable desde todo punto de vista que ahora para representar los intereses de los ciudadanos si no hemos concurrido con anterioridad a unos comicios y por consiguiente no hemos obtenido algún escaño, no podamos hacerlo si no es presentando la firma del 0’1 % del censo de la circunscripción en la que nos presentamos en 20 días habilitados entre la convocatoria oficial de elecciones y la finalización del plazo para la presentación de listas, sin que ningún elector pueda presentar su firma a mas de una candidatura.
Y es que si ya que, si es difícil movilizar al electorado para que simplemente meta una papeleta con su voto en una urna, mas difícil lo será que te firme para avalar tu candidatura y no porque tu proyecto sea mejor o peor que el de tu contrincante político, si no porque la gente no está por la labor, además es cuestionable que te exijan eso cuando quienes han hecho el cambio legislativo han sido incapaces después de 40 años de democracia de movilizar al 70% del electorado en unos comicios generales.
Es imperdonable e injusto que nuestros políticos se sean incapaces de llegar a acuerdos de mínimos para salir juntos de esta crisis económica que esta asolando al país y que si llegue a consenso en poner trabas a la participación ciudadana en la vida política, ya que mientras se ponen trabas para eso, nadie abren investigaciones que esclarezcan si partidos como Plataforma por Cataluña contratan a candidatos para que los representen pervirtiendo así el principio democrático de nuestras instituciones.
Es por todo lo expuesto que el legislador debería redefinir las líneas maestras del juego democratizo de nuestro país, para crear una democracia de todos y para todos no un sistema donde unos cuantos tengan derecho a decidir sobre el conjunto, ni donde ser concejal sea un mero contrato, ya que en un país donde a la jefatura del estado se accede por derecho de nombre y rango no podemos ni debemos permitir que la democracia tome ese camino
Antonio Garcia Leal ®